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miércoles, 16 de octubre de 2013

Drácula, príncipe de las tinieblas (1966) de Terence Fisher



Dos parejitas de vacaciones por Los Cárpatos
Ocho años tardó la Hammer en recuperar al personaje de Bram Stoker, que tanto éxito les había proporcionado en 1958. Recordemos que el "Drácula" de Terence Fisher, en sí ya había contado con una secuela titulada "Las novias de Drácula", en la que aunque no apareciese el propio Conde Drácula, sí mantenía en común con la original el personaje del mata-vampiros Van Helsing (interpretado por Peter Cushing), por lo tanto este film vendría a ser la tercera parte de la saga vampírica del mítico Conde perpetrada por la compañía inglesa. No obstante, en sí, teniendo a Drácula como protagonista (y retornando el gran Christopher Lee) es la segunda y ya en el prólogo comprobaremos como la enlazan como secuela directa de la primera, recordándonos el combate final entre Van Helsing y el Conde Drácula, donde este segundo fue destruido. Posteriormente veremos la llegada "casual", hasta el castillo del Conde, de dos matrimonios que se encuentran de viaje por los Cárpatos. Una vez allí serán muy bien recibidos por un siniestro sirviente (no sabemos bien de donde salió) que será el encargado de proporcionarle a su amo la sangre de uno de estos "invitados", que es lo que éste necesitaba para resucitar. Y así volveremos a tener al rey de los vampiros entre los vivos, para que nadie se olvide que su reinado de terror no tendrá descanso así como así. 

Invitados a pasar una "apacible" noche en el castillo de Drácula

Resucitando a Drácula
Bueno, recuerdo haber visto esta película un Sábado por la noche en el mítico programa de la2 "Alucine" donde emitían películas de terror. La vi, con cierta inquietud puesto que al comenzar recuerdo aquel cartel enorme que advertía, "no recomendada para menores de 18 años" y a mí que tendría unos 6 ó 7, en ese momento, me resultó algo fascinante el hecho de estar desafiando una advertencia como ésa. La película me dejó fascinado, de aquélla me pareció muy violenta: recuerdo sobre todo la escena en la que a una vampiresa (guapísima Barbara Shelley) le hunden una estaca en el corazón y cómo brotaba la sangre roja intensa de su vientre. Esa escena me dejó atónito y maravillado a la vez, ¡cómo se ven las cosas cuando se es un niño! Debido a estos recuerdos le tengo un especial afecto a esta película y para mí es una de las mejores, no sólo de Drácula, sino de las que hizo la Hammer en general. 

El Conde Drácula (Christopher Lee) regresa de nuevo

¿Que tiene aspectos que podría ser mejorables? Sí. ¿Que me hubiese gustado que Christopher Lee hubiese pronunciado alguna palabra durante el film? Pues también. Aunque hay que decir que Christopher Lee está magnífico, resulta mil veces más amenazante con tan sólo mostrarnos esa mirada y esa figura tan alta moviéndose a ese ritmo tan lento y amenazador y esos ojos enrojecidos, a mí de pequeño me acojonó con creces. Por otro lado, el apartado técnico de la película es sobresaliente, al nivel del "Drácula" de 1958; escenarios, fotografía, decorados, son absolutamente admirables, tienen como digo ese toque "Hammer" tan maravilloso y tan característico. 

Helen (Barbara Shelley) una sensual vampiresa con toques lésbicos

A punto de beber la sangre de Drácula
El resto de los actores, pues ni fu ni fa, simplememente cumplen con su cometido de manera acertada y punto, sin destacar ninguno sobre otro. En definitiva, la película es muy entretenida, está muy bien hecha (por supuesto hay que tener en cuenta que es de 1966 y los años pasan), no le falta cierta mala leche (de la marca "Hammer") y nos aporta una visión distinta de "Drácula". Hay que reconocer que la Hammer aportó enfoques muy distintos sobre este magno personaje del terror, por lo tanto es un "Drácula" con mucha personalidad, único. Prefiero este film mil veces antes que por ejemplo la tan sobrevalorada versión de Coppola y ya no hablar de la mierda que ha hecho Dario Argento en 2012. Desde luego recomiendo esta película, es diferente y magnífica, Christopher Lee está soberbio ofreciendo un estilo (que creó escuela) imperecedero de interpretar al personaje de Bram Stoker. Como ya he dicho, para mí de las mejores películas que ha realizado la productora británica, una maravillosa obra de culto y un estandarte del terror gótico de los sesenta. Como secuela, es maravillosa, desde mi punto de vista está a la altura de su predecesora (me refiero a la de 1958 no a "Las novias de Drácula").

A punto de atravesar a Helen con una estaca

*MI MOMENTO FAVORITO: la muerte de Drácula en el film, me parece una muerte muy original y diferente a lo visto incluso hasta hoy en día. El pobre Conde acabará sepultado bajo el hielo que se quiebra bajo él. 

Descansa en tu tumba helada Draculín

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