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jueves, 25 de diciembre de 2014

Las vacaciones de una chiflada familia americana (1983) de Harold Ramis



Los Griswold de vacaciones, ¡sálvese quien pueda!
La coletilla de "National Lapoon's" dio para mucho juego en el terreno americano, tras el éxito de "Desmadre a la americana" (cuyo título original era "National Lapoon's American House"). El término "National Lapoon" tuvo su origen en una revista cómica (de este mundillo provienen nombres como Bill Murray, John Candy, el propio Harold Ramis, etc.), que posteriormente se atribuyó a muchos medios audiovisuales, desde espacios televisivos a películas y dicho término sirvió para configurar una especie de franquicia cinematográfica (iniciada con la ya mencionada "Desmadre a la americana"), aunque las películas que la configuran argumentalmente no guarden relación entre sí, sin más el reclamo del título para ganar adeptos de cara a la taquilla. 

Eso sí, estas vacaciones van a ser de todo menos tranquilas

Simpático homenaje a "Psicosis"
Pues bien este "Vacation", (escrita por el magnánimo John Hughes, autor de "Solo en casa" y creador de un buen puñado de clásicos de la comedia juvenil ochentera) bautizada en España como "Las vacaciones de una chiflada familia americana" (¡toma ya!, más bien podría pasar por un resumen de la propia trama), viene a presentarnos en tono jocoso y satírico la odisea que puede suponer algo tan simple como marchar de vacaciones en familia. Los protagonistas son una estampa de familia americana tradicional, los Griswold, con su papi (el cómico Chevy Chase), la mami buenorra (Beverly D'Angelo) y los hijitos preadolescentes (Dana Barron y el mítico Anthony Michael Hall -estrellita juvenil ochentera, visto en pelis como "16 velas", "El club de los cinco" o "Eduardo manostijeras"). Total, que el pack completo decide irse en un viaje en coche, a tropecientos kilómetros de su dulce hogar, para visitar un parque de atracciones, al estilo de Disney World, que es la pera limonera. 

La conductora cachondota (Christie Brinkley)

¡Ojito con lo que está leyendo el pervertidillo del niño!
Pero claro, su viaje no va a ser un camino de rositas, a la pobre familia le pasará de todo, y cuando digo de todo, me refiero a un sin fin de desgracias en tropel, que con casi toda seguridad, nos harán que se nos escape la carcajada fácilmente. En sí, el film es bastante entrañable, yo recuerdo que lo vi siendo un crío y lo disfruté mucho, aunque sí que es verdad que quizás algunos gags resultan un poco anodinos y con el paso de los años han perdido cierta fuerza. La peli hay que verla desde su lado absurdo, y no tomarla en ningún momento en serio, para que pueda convertirse en un producto ameno y digerible, si se toma desde el punto de vista racional, lógicamente perdería todo el encanto, sobre todo en momentos en los que se hace uso de un humor negro un tanto exagerado (véase por ejemplo cuando la familia debe cargar con el cadáver de la abuela, que la ha palmado durante el viaje). 

Se nota que eran los ochenta, en una peli para todos los públicos podían
aparecer unas tetas y no pasaba nada, ¡qué retroceso hemos vivido hoy en día!

En su momento tuvo bastante éxito, lo que generó varias secuelas (inclusive "¡Socorro, ya es Navidad!" que es la que me atañe comentar precisamente en estas fechas), las cuales van narrándonos nuevas y alocadas peripecias de los Griswold, los cuales cargarán siempre con el San Benito de no tener unas vacaciones normales y tranquilas. Entrañable y entretenida sin más, hay que ser condescendiente con ella para verle el atractivo. A destacar su magnífico tema musical principal, "HOLIDAY ROAD".

Simpático cameo del difunto John Candy

*MI MOMENTO FAVORITO: cuando les palma la abuela en pleno viaje y se ven obligados a continuar camino con el cadáver. Un poco macabro, pero tronchante.

''Está fría"

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